La toma de carreteras y edificios no se permitirán por la Policía Nacional, para resguardar los derechos de los demás ciudadanos.
La Fuerza de Seguridad Pública de Honduras advirtió que no más toma de carreteras y edificios gubernamentales, como mecanismo de protesta de los sectores sociales.
Lo anterior lo dijo el director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, quien reconoció las necesidades de la población de reclamar.
El comisionado policial mencionó que se debe buscar el diálogo y las instancias correspondientes para no afectar a la sociedad hondureña.
Durante su comparecencia ante los medios nacionales, Sánchez se refirió a la protesta de los policías depurados que se apostaron en el peaje de Zambrano.
De acuerdo con lo que se informó, el desaojo de los agentes depurados fue violento, ocasionando fuertes críticas para el gobierno que preside Xiomara Castro.
“A partir del martes ustedes vieron un cambio en la conducta operacional-institucional en cuanto al tema de toma de carreteras y toma de instalaciones”, comentó.
Pese a que este gobierno es de tendencia socialista, las protestas de los pobladores no han cesado.
Cifras policiales indican que de enero de 2022 hasta la fecha se han registrado unas cuatro mil tomas de instalaciones de edificios y ejes carreteros.
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Esta situación ha ocasionado serios problemas porque se ha violentado de manera abrupta los derechos fundamentales como la libre locomoción y paralización de la economía.
Para abordar esta problemática, el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad (CNDS), aprobó a finales de marzo un protocolo a seguir en los desalojos.
Sánchez indicó el diálogo como primera instancia para abordar a los manifestantes y de no lograrse un acuerdo se usará la fuerza.
En la toma de edificios públicos se esperará una orden judicial para proceder al desalojo de las personas que se aposten en los mismos a protestar.
Sánchez dijo que se reservan el derecho del uso de las facultades que la Ley les otorga el uso de la fuerza.