Las autoridades de Salud de Honduras se resisten a declarar emergencia a causa del dengue, por cuya enfermedad se han reportado 22 personas fallecidas.
Sin embargo, se ha ordenado arreciar en los operativos de limpieza, especialmente en los departamentos de Francisco Morazán, Comayagua y Cortés.
Los mismos personeros sanitarios reconocieron que se ha dejado de fumigar, debido a las constantes lluvias que inhabilitan el químico que se rocía para eliminar el Aedes aegypti.
Algunas cifras de contagio de dengue
No se trata de algo pasajero, puesto que este es un problema que enfrentan los epidemiólogos de manera cíclica cada año, pero no hay muchos logros por la falta de conciencia de la población.
De acuerdo con las cifras oficiales de la Secretaría de Salud, hay más de 20, mil contagios de dengue en todo el territorio, hasta la semana 40 del presente año.
El jefe de la Unidad de Vigilancia, Lorenzo Pavón, informó que Comayagua, es el departamento con la mayor incidencia de mortalidad, con 16 casos acumulados.
A su vez, Cortés y Francisco Morazán, que albergan a las ciudades más pobladas, San Pedro Sula y el Distrito Central, reportan dos muertes cada uno.
Santa Bárbara y Yoro también registran un fallecimiento cada uno, sumando 22 decesos hasta la fecha.
La mayor concentración de casos se observa en las regiones sanitarias del Distrito Central, Comayagua, La Paz, Atlántida, Colón, Olancho y Yoro.
Wolbachia podría tener el secreto de la lucha contra el dengue
Considerado como el animal más mortífero de todos cuantos existen, el mosquito destaca por su resistencia y su capacidad de adaptación, que le han permitido colonizar la mayor parte del planeta, a excepción de la Antártida.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que cada año mueren más de 700.000 personas a causa de enfermedades transmitidas por este insecto, del que hay más de 2.500 especies catalogadas.
Es especialmente reseñable el caso de la malaria, propagada por el mosquito Anopheles y responsable de la muerte anual de 400.000 personas, sobre todo niños.
También el del dengue, transmitido mayoritariamente por el Aedes aegypti y causante de entre 100 y 400 millones de infecciones cada año, aunque su letalidad es menor: unos 40.000 fallecimientos anuales.
La mayor amenaza está en las zonas tropicales
La mayor amenaza para la salud pública sigue estando en las regiones tropicales y subtropicales.
Allí hay países como Honduras, donde los brotes son cada vez más graves y se registran miles de casos al año. Un problema que se agrava porque en la actualidad no hay tratamientos específicos disponibles contra el dengue ni vacunas que proporcionen suficiente protección.
Además, las tradicionales técnicas de control, como el uso de pesticidas, también han provocado que los mosquitos se vuelvan cada vez más resistentes.
«Los umbrales de emergencia están alcanzando niveles alarmantes y los métodos de prevención actuales se quedan cortos para proteger a la población del dengue», asegura Edgard Boquin, coordinador de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Honduras.
Esta organización humanitaria, en colaboración con las instituciones del país y con la iniciativa World Mosquito Program, han comenzado a aplicar allí un método que ya ha demostrado su eficacia en otras zonas del planeta con altos niveles de dengue.
Se trata de la liberación de mosquitos Aedes aegypti portadores de la bacteria Wolbachia, que reduce la capacidad de los insectos para transmitir arbovirus.