El festival de las famosas Chimeneas Gigantes, de Trinidad, Santa Bárbara, fue inaugurado por la Presidenta Xiomara Castro, durante un colorido desfile.
Además recibió un reconocimiento como la primera mujer presidenta de Honduras, de parte de los “chimeneros tecos” de este municipio.
“Estoy emocionada, la familia de mi padre (Irene Castro) era originaria de aquí, así que le guardo mucho cariño a esta tierra”, dijo la mandataria a los medios de comunicación que salieron a su encuentro.
Grupos de danza folclórica y bandas de guerra se unieron a darle la bienvenida a la mandataria, quien llegó con un sombrero ala ancha, en compañía de su hijo y secretario privado, Héctor Manuel Zelaya; el presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo; el designado presidencial, Renato Florentino; la ministra de Cultura, Anarella Vélez, y el alcalde anfitrión, Allan Paredes.
Un baño de cultura popular
“Bienvenida, Xiomara, a la capital de cultura popular, pueblo sede de las chimeneas gigantes y hoy, con su presencia, nos sentimos la capital de Honduras, este es un homenaje para usted”, dijo el alcalde, en su mensaje de bienvenida.
En sus palabras inaugurales del festival, la Presidenta destacó el apoyo a la cultura, el compromiso y la unidad de la gente para celebrar lo que calificó como un “regalo para la humanidad y para todos los hondureños”.
Lamentó que las chimeneas se tengan que quemar al final del desfile, pero aclaró que no se trata de un acto violento, sino de un símbolo de renovación entre los pobladores.
“Trinidad es un ejemplo que mantiene viva la memoria y cuando tenemos viva la memoria es cuando hay justicia en nuestro país, estas chimeneas son un ejemplo vivo de un pueblo que despertó y la expresión política y cultural de la resistencia y la creatividad popular, felicidades a todos los organizadores”, declaró la Presidenta.
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