El director ejecutivo de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Carlos Hernández, expresó su preocupación sobre el proceso de elección del Fiscal General y Adjunto, señalando que el principal obstáculo radica en la falta de unidad y diálogo en el Congreso Nacional.
Hernández destacó que la ausencia de una dirección efectiva ha dificultado la consecución de consensos necesarios y ha dejado margen para especulaciones sobre posibles intereses políticos detrás de la elección.
Hernández, manifestó su desaliento ante la falta de un ambiente propicio para el diálogo y la unidad en el Congreso, aspectos esenciales para llevar a cabo una elección justa y transparente del Fiscal General y Adjunto.
Según Hernández, la carencia de una dirección sólida ha dado lugar a prácticas políticas cuestionables, generando preocupación en la sociedad.
«No visualizo un ambiente de unidad ni diálogo en el Congreso, ya que no se están adoptando las medidas necesarias para alcanzar consensos», declaró el director de ASJ.
Además, expresó su inquietud acerca de la posibilidad de que se inventen procedimientos con el fin de colocar a personas que respondan a intereses particulares, en lugar de elegir a los candidatos más idóneos para el cargo.
A pesar de estas dificultades, Carlos Hernández mantiene la esperanza de que en septiembre se elija al nuevo Fiscal General y Adjunto.
Sin embargo, subrayó la volatilidad del panorama político y advirtió que las circunstancias pueden cambiar rápidamente en la política.
«Hoy se critican duramente, se acusan de nexos con narcotraficantes, y al día siguiente comparten amistosamente una comida. Lamentablemente, esto no refleja una conducción adecuada, sino más bien otro tipo de prácticas poco transparentes», cuestionó.
El director de ASJ expresó la preocupación de su organización ante el ambiente de desconfianza y temor en el Congreso.
Ante la posibilidad de que se incorporen personas poco idóneas para el cargo, están en constante diálogo con los diputados de las diferentes bancadas para velar por un proceso justo y evitar posibles actos ilegales.