La presidente Xiomara Castro enviará al Congreso Nacional un decreto de Ley para regular el estado de excepción en unos 60 barrios y colonias de Tegucigalpa y San Pedro Sula.
El objetivo del Poder Ejecutivo tiene que ver con la protección ciudadana, mientras la Policía Nacional desmantela la actividad criminal en esos sectores.
La mandataria tomó la decisión debido a las quejas de los empresarios que ya no aguantan el “impuesto de guerra”, que cobran las maras y pandillas de las principales ciudades.
De acuerdo con informes no gubernamentales, la extorsión le genera a los grupos delictivos más de 18 mil millones de lempiras al año.
A partir del anuncio de estas medidas por parte de Castro, agentes policiales y militares mantienen patrullajes día y noche en las zonas conflictivas, dando con las primeras capturas de cabecillas de estas “clicas”.