Parece irreal, pero los extorsionadores se han infiltrado en el Poder Judicial, de acuerdo con una denuncia dada a conocer por el director Ejecutivo de la Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ) Carlos Hernández.
Y es que Hernández, durante una comparecencia en un medio televisivo nacional reveló que un guardia extorsionaba a los testigos protegidos, cuando eran trasladados a las salas de audiencia.
Este es uno de los casos que fueron dados a conocer en un informe presentado por esa institución. Esta es una historia que le narró un juez de como un empleado con historial delictivo movilizó a una de sus víctimas hasta una Sala Judicial.
La pregunta real para cualquiera podría ser, ¿cómo es posible que una persona con historial delictivo entre a trabajar a la Corte Suprema de Justicia?, una situación realmente preocupante.
De acuerdo con el testimonio del juez, al testigo «lo llevan en la cajita (sala) donde los meten para que de su testimonio y cuando está ahí de repente se pone nervioso y empieza a temblar, los jueces se asustan y preguntan ¿Qué pasa?
Debido al estado nervioso, al testigo hay que sacarlo de la sala y llevarlo a un cuarto aparte para tratar de estabilizarlo y consultarle la razón de su cambio de ánimos.
«Resulta ser que el celador del Poder Judicial, la persona que estaba moviendo la cajita era el extorsionador», reveló Hernández.
De acuerdo con el director de ASJ, el sujeto apuntado como criminal fue denunciado, procesado y condenado luego del hecho. El Código Penal vigente en Honduras establece en su artículo 373 que la extorsión se pena con 10 a 15 años de prisión.
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