¿Quién era Isy Obed Murillo?
Isy Obed Murillo, un joven de 19 años originario del departamento de Olancho, es reconocido como el primer mártir de la Resistencia Popular en Honduras. Su vida fue trágicamente interrumpida el 5 de julio de 2009 durante una manifestación en el Aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa, mientras apoyaba el regreso del expresidente Manuel Zelaya tras su destitución.
Breve perfil de Isy Obed Murillo
- Lugar de origen: Nació en la colonia Venezuela, Olancho.
- Familia: Era el sexto de 12 hermanos, hijo de Silvia Mencias y David Murillo, pastor de una iglesia pentecostal.
- Educación: Estudiaba el segundo curso de ciclo común en el Instituto «21 de febrero» en Tegucigalpa.
El día de su muerte
El 5 de julio de 2009, miles de hondureños se reunieron cerca del aeropuerto Toncontín con la esperanza de recibir al expresidente Zelaya. Sin embargo, las fuerzas militares bloquearon el aterrizaje del avión presidencial. En medio de la protesta pacífica, Isy Obed Murillo fue alcanzado por un disparo de un fusil M16, ejecutado por militares, perdiendo la vida de forma instantánea.
Captura de exjerarcas militares (enero de 2025)
Por el caso, el 5 de enero de 2025 fueron arrestados tres altos mandos militares retirados, señalados como responsables de los hechos:
- Romeo Vásquez Velásquez, exjefe del Estado Mayor Conjunto.
- Venancio Cervantes Suazo, exsubjefe del Estado Mayor.
- Carlos Roberto Puerto Fúnez, excomandante del Comando de Operaciones Especiales.
El Ministerio Público indicó que los disparos realizados con fusiles de alto calibre fueron desproporcionados e indiscriminados, resultando en muertes y lesiones graves. Además, señaló que estos actos no fueron aislados, sino crímenes ordenados y ejecutados bajo la supervisión de los altos mandos militares mencionados.
También te puede interesar: Fuerzas Armadas de Honduras conmemora 199 aniversario de fundación del Ejercito con distinciones militares, condecoraciones y ascensos de oficiales
Contexto e implicaciones
El caso de Isy Obed Murillo se convirtió en un símbolo de la represión durante la crisis política de 2009 en Honduras, siendo registrado como un ejemplo de violación de los derechos humanos. La reciente captura de los exjerarcas militares representa un avance en la búsqueda de justicia para las víctimas de estos hechos.
