La expresidenta de la Corte Suprema de Justicia de Honduras, Vilma Cecilia Morales fue acusada de lavado de activos, debido a que permitió el ingreso de dinero sin justificar su procedencia, para capitalizar el Banco de los Trabajadores (BANTRAB).
Morales aprobó la liquidación forzada de esa institución financiera durante el año 2010, cuando fungía como comisionada presidenta de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), durante el mandato de Porfirio Lobo Sosa.
Además de la ex funcionaria se encuentran implicados sus compañeros dentro de la CNBS, de acuerdo con la denuncia interpuesta por el abogado Norman Torres y José Dolores Valenzuela, ante la Unidad Fiscal Especializada de Redes de Corrupción (UFERCO).
“Ella es la principal denunciada porque ellos autorizaron y dijeron que estaba bueno el ingreso de 300 millones 100 mil lempiras que no se sabe de donde salieron”, dijo Torres.
Por su parte, Morales se defendió: “todas estas decisiones fueron notificadas a la Junta Directiva y a las autoridades del banco, ¿para qué? para que ellos tomaran las medidas que nunca adoptaron».
En ese sentido, el Congreso Nacional de Honduras autorizó la capitalización de BANTRAB -agregó-, para añadir nuevos accionistas, unas 49 cooperativas que conformaron un capital de 300 millones de lempiras.
También detalló que el Fondo de Seguro de Depósitos (Fosede) aportó 200 millones reembolsables que se iba a recuperar con los activos que se constituyeron en un fideicomiso.