Nayib Bukele busca la reelección en El Salvador: anuncian oficialmente su candidatura, el controvertido presidente cita el fallo de un juez leal que elude el artículo 152 de la constitución que prohíbe la reelección para el cargo
Nayib Bukele avanza en sus pretensiones de mantenerse en el poder en El Salvador a pesar de la prohibición a la reelección establecida en la Constitución del país centroamericano.
Nuevas Ideas, el partido del mandatario, anunció que ha inscrito las precandidaturas de Nayib Bukele y su vicepresidente, Félix Ulloa, para compartir por la reelección en las elecciones previstas para el próximo año.
La candidatura de Nayib Bukele se sustenta en un controvertido fallo de la Sala de lo Constitucional, cuyos jueces, nombrados por el mandatario y leales a él, hicieron una lectura de la Constitución que despeja el camino del popular presidente para repetir mandato.
Aunque Bukele no se ha pronunciado sobre el anuncio de su partido, sí retuiteó el mensaje que Nuevas Ideas publicó el domingo en su cuenta de Twitter.
“Comunicamos al pueblo salvadoreño que el Presidente Nayib Bukele y el vicepresidente Félix Ulloa ya están inscritos como precandidatos para Presidente y Vicepresidente de la República de El Salvador, en el partido más grande de la historia de El Salvador.
Las Nuevas Ideas son invencibles”, apuntaba el movimiento creado por Nayib Bukele y que se ha convertido en una fuerza política arrolladora en El Salvador.
El controvertido mandatario cuenta con una enorme popularidad en su país y se da por descontado que ganará las próximas elecciones, a pesar de las críticas hechas a sus medidas para combatir la delincuencia.
Nayib Bukele ya había consolida su poder en 2021 con una victoria sin precedentes en las elecciones legislativas, tras lograr un número de diputados inédito que le ha permitido el control de importantes instituciones y le ha dado mano libre para impulsar su agenda política, que incluye una guerra contra las pandillas que desangraban el país.
Desde hace un año, Nayib Bukele mantiene un estado de excepción en El Salvador y la suspensión de las garantís constitucionales, además de impulsar una fuerte reforma en las cárceles y de apresar a más de 68.000 personas, acusadas de pertenecer a agrupaciones criminales.
El mandatario ha reaccionado con mofa a las críticas de organizaciones de derechos humanos que denuncian sistemáticas vejaciones contra los detenidos y de opositores políticos, que lo tildan de un nuevo “dictador”.