Los fiscales de NY pidieron que se restrinja la difusión de los medios de prueba en el caso JOH por considerar que la información es sensible.
Los fiscales de NY pidieron que se restrinja la difusión de los medios de prueba por considerar que la información es sensible.
El juez Kevin Castel autorizó con su firma la secretividad de medios de prueba relacionados al caso del expresidente Juan Orlando Hernández.
Esta solicitud en el caso JOH es de fiscales del Distrito Sur de Nueva York con el consentimiento del imputado y su abogado Raymond Colon.
En tal sentido, los representantes de la justicia estadounidense pidieron la restricción de difusión del archivo conocido como «Material 3500».
La solicitud se hizo debido a que todo este material es considerado información sensible.
Esto, porque contiene «parte de terceros en investigaciones delicadas en curso en Honduras y otros lugares. Así como actos reales y amenazados de violencia contra víctimas cuyas identidades no son públicas».
Prohibiciones para la defensa de JOH
Con dicha resolución, alias JOH y su defensa no podrán transportar ni transmitir los medios de prueba fuera de los Estados Unidos.
Tampoco deberán mostrar ni difundir información a otra persona que no sea el acusado o personas que trabajen con el abogado Colon.
Además, el exgobernante no puede poseer el «Material 3500» antes, durante o después de audiencias sin la presencia de su apoderado legal.
Igualmente, se ordenó que Hernández y su defensa tiene que devolver al Gobierno de EE.UU., o destruir lo recopilado una vez se cierre el juicio o se hayan presentado las apelaciones finales.
Finalmente, Raymond Colon podrá solicitar proporcionar ciertos materiales a personas que tengan su acceso prohibido con la autorización del tribunal y notificación del Gobierno norteamericano.
Anteriormente, en septiembre de 2022, el juez ordenó declarar en secretividad los vaciados telefónicos hechos al exgobernante, que forman parte de la carga probatoria de la Fiscalía de Nueva York.
Caso JOH
El expresidente Juan Orlando Hernández fue solicitado en extradición por Estados Unidos el 14 de febrero y capturado por la Policía Nacional un día después.
Es acusado por los cargos de conspiración para importar cocaína y posesión de metralletas y dispositivos destructivos.
El 21 de abril se consumó la extradición de JOH a EE.UU., desde entonces recluido en el Centro de Detención de Brooklyn.
Inicialmente, su juicio estaba pactado para el 17 de enero, pero tras una solicitud de la fiscalía y defensa con el fin de tener más tiempo para analizar las voluminosas pruebas del caso; entre otros motivos, se reprogramó al 24 de abril.