El 31 de marzo de 2020 Osiris Luna permitió que 5 personas encapuchadas ingresaran al penal de máxima seguridad de Zacatecoluca sin identificarse y se reunieran con 8 líderes de las 3 principales pandillas del país a puertas cerradas. En la imágen, Luna da un recorrido a los encapuchados por el sector especial 6 de esa prisión. (Tomada de El Faro).
La Fiscalía del Distrito Este de Nueva York de Estados Unidos imputó a 13 líderes de la MS-13 y señala que negociaron con funcionarios salvadoreños.
Los acusados por narcotráfico y crimen organizado tuvieron vínculos directos con los gobiernos de Salvador Sánchez (2014-2019) y Nayib Bukele (2019-presente).
Un documento detalla que tras las pasadas elecciones, los personeros se reunieron en secreto con líderes de la MS-13 en centros penales y otros lugares.
En tal sentido, se menciona que el Director de Centros Penales, Osiris Luna, y el director de Reconstrucción del Tejido Social, Carlos Marroquín.
Presuntamente otros pandilleros en libertad también asistían a las reuniones, mismas que derivaron en negociaciones que permitieron a la MS-13 un «alto nivel de beneficios».
Además, «la Ranfla Nacional exigió que el Gobierno de El Salvador se negara a extraditar a los líderes de la MS-13». Todo esto a cambio que la estructura criminal acordara «reducir el número de asesinatos públicos» en el país.
Bukele protegido por el poder
La periodista acreditada por el Departamento de Estado, Carmen Rodríguez, consideró EE.UU., no emprenderá acciones contra Bukele mientras siga en la presidencia.
«Si tienen algo contra el presidente Bukele va a ser hasta que él deje el poder», tal como sucedió con el expresidente Juan Orlando Hernández.
Por otra parte, señaló que los funcionarios señalados, con nombre y apellido, estarían cerca de recibir una acusación formal en su contra, por NY.
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