Cinco caballos del Ejército británico se han dado a la fuga y han sembrado el caos por el centro de Londres, provocando con su carrera heridas en cuatro personas que han sido hospitalizadas, según ha confirmado la Policía Metropolitana.
De siete jinetes, cuatro cayeron al suelo, mientras que cinco de los animales huyeron. Los caballos se dispersaron y varios de ellos llegaron a varios kilómetros de distancia, después de provocar caos a su paso por distintas zonas y en plena hora punta.
Los equinos, que posteriormente han sido contenidos por las fuerzas del orden, han galopado sin control por céntricas calles de la capital durante alrededor de dos horas y, además de daños personales, han provocado destrozos en mobiliario urbano y en diversos vehículos.
Vídeos colgados en las redes sociales han grabado la carrera de uno blanco, cubierto de sangre, que corría al lado de otro negro y que han sido posteriormente interceptados tras haber sembrado el nerviosismo entre conductores, ciclistas y transeúntes.
Un portavoz del Ejército ha señalado en un comunicado que los animales «quedaron sueltos durante los ejercicios rutinarios llevados a cabo esta mañana» después de escuchar un fuerte estruendo que los asustó.
