Pekín suspende las clases presenciales en las escuelas y guarderías tras registrar dos muertes por covid, las primeras por esta causa que se notifican oficialmente en China en los últimos seis meses.
La Comisión Nacional de Sanidad de China notificó, además, la detección de 25.000 nuevos positivos de coronavirus, confirmando el recrudecimiento de la pandemia en el país, con rebrotes en varias ciudades.
Numerosos restaurantes en la capital china, sobre todo en el distrito de negocios de Chaoyang, cerraron o sirvieron solo pedidos para llevar y las autoridades han pedido a los residentes que en lo posible trabajen desde casa.
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Asimismo, se mantienen los requisitos de mostrar en una aplicación del teléfono móvil una prueba negativa PCR realizada en las 24 horas previas para acceder a lugares públicos como supermercados, museos, parques o centros comerciales.
Aunque un número indeterminado de edificios en Pekín permanecen bajo confinamiento por haberse detectado un caso de covid en su interior, la capital china ha evitado por el momento decretar un confinamiento a gran escala, pese a que sus cifras de contagios diarios son similares a las que registraron ciudades que impusieron cierres generalizados a lo largo de los últimos dos años.
Rebrotes en Cantón y Chongqing
Por su parte, la ciudad meridional de Cantón, de más de 15 millones de habitantes, sigue lidiando con un rebrote que ha dejado en los últimos días casi 10.000 nuevas infecciones.
Asimismo, la megalópolis central de Chongqing notificó el último día 6.000 nuevas infecciones entre su población de unos 30 millones de habitantes.
La política de ‘cero covid’, que consiste en el aislamiento de todos los contagiados, estrictos controles fronterizos, pruebas PCR constantes a la población urbana y confinamientos donde se detectan casos, permanece vigente desde comienzos de 2020 en el país asiático, a pesar de síntomas de agotamiento entre la población en los últimos meses que han desembocado en disturbios recientes en ciudades como Cantón.