Nuevo giro de guion en el Barça. Según ha avanzado Jordi Basté en RAC1 y ha podido confirmar SPORT, el presidente del club, Joan Laporta, tiene decidido que Xavi Hernández no siga en el banquillo azulgrana la próxima temporada.
La decisión, que probablemente no se haga oficial hasta después del partido contra el Rayo Vallecano si el equipo logra el objetivo de mínimos de ser segundos en la Liga, la tomó el presidente este jueves tras la rueda de prensa de Xavi Hernández previa al partido contra el Almería.
A Laporta, que ya mostró su enfado con el equipo tras la derrota ante el Girona en Montilivi, no le gustaron las palabras de Xavi, en las que afirmaba que sería muy difícil competir la próxima temporada con el Real Madrid y con otros clubes europeos por las dificultades económicas por las que pasa la entidad.
Xavi pedía cambios en la plantilla para no cometer los errores de este curso, pero advertía a los aficionados que el club no estaba en condiciones de fichar lo que quería, como sí podía hacer años atrás.
Estas palabras causaron una profunda decepción en el presidente, que, muy enfadado, no viajó a Almería, como tampoco lo hizo el director deportivo, Deco.
Laporta, enfadado y decepcionado y tras hablarlo con los miembros de la comisión deportiva y escuchar también a algunos de sus directivos, decidió dar marcha atrás con el acuerdo que selló con Xavi el pasado 24 de abril, por el que el de Terrassa se desdecía de su anuncio de dejar el banquillo el próximo 30 de junio y seguiría como entrenador del Barça la próxima temporada.
Precisamente el hecho de que Laporta no viajase a Almería hizo saltar ya todas las alarmas en Barcelona, aunque Xavi, tras ganar el partido ante los de Pepe Mel, explicó que nadie del club se había dirigido a él para hablar de su futuro ni de sus declaraciones.
Desconocía el nuevo giro de guion y la decisión que se había tomado desde Arístides Maillol.
El presidente Laporta tiene previsto viajar hoy a Zaragoza y mañana presenciar en directo la final de la Copa de la Reina que jugará el equipo de Jonatan Giráldez contra la Real Sociedad.
El domingo estará en el palco del Olímpic Lluís Companys para ver el partido contra el Rayo Vallecano.
Una victoria del Barça certificará el objetivo de mínimos de la temporada, la segunda plaza en la Liga. Con el objetivo conseguido, la semana que viene, según apuntan desde el club, será el momento de volver a hablar con Xavi y anunciar el cambio en el banquillo, decisión que ya ha tomado el presidente y que, según las mismas fuentes, solo podría evitar otro giro radical de los acontecimientos, algo nunca descartable en el Barça en los últimos tiempos.
De hecho, según algunos directivos, ya se marcharon el día 24 de abril tras una reunión de la junta convencida de que Xavi no iba a seguir y horas después se enteraron de que sí lo haría tras la famosa cena del sushi en casa del presidente.
Aquel día, el técnico de Terrassa convenció a Laporta con su discurso y su ilusión. Su rueda de prensa del miércoles convirtió el enamoramiento del presidente en decepción y ha provocado que, salvo nuevo giro radical, se tome la decisión de prescindir del técnico egarense.