La Selección española de fútbol femenino visitaba este martes a Suiza en la cuarta jornada de la UEFA Women’s Nations League, y pudo mantener el liderato y el invicto con su cuarta victoria en el Grupo 4 de la Liga A tras golear (1-7) al combinado helvético, al que ya derrotaron con otro contundente 5-0 en territorio español el pasado mes.
Después de la sufrida victoria en Palermo ante Italia (0-1), en la que brilló más su oficio que su calidad, las de Montse Tomé llegaban con ganas de reivindicarse a Zúrich.
Y lo hicieron de principio a fin, mostrando una superioridad aplastante que pudieron plasmar en el marcador con suma facilidad.
Fue sencillamente un paseo, que ha acercado mucho a las campeonas del mundo a objetivos más ambiciosos, como los Juegos Olímpicos de París del próximo verano.
Así las cosas, España no perdió el tiempo ante Suiza. Apenas corría el minuto cuatro de encuentro cuando Oihane Hernández apareció completamente sola al segundo palo en un córner botado por Tere Abelleira para poner la cabeza y la delantera hispana en el marcador.
A los cuatro minutos, Crnogorcevic vio la única amarilla de un partido muy limpio y respetuoso, y en el once fue Alexia Putellas la que amplió la ventaja.
Con ese remate a placer llegando desde segunda línea, la futbolista catalana abrió distancias y certificó el dominio español. La Roja controló el juego a su antojo a partir de ahí, sofocando los intentos de posesión de las rivales, aunque en la primera parte Suiza avisó con un par de contragolpes venenosos. Sin embargo, Misa estuvo inconmensurable bajo palos.
En la segunda mitad, España aprovechó su reflexión del descanso para poner toda la carne en el asador y sentenciar antes de complicarse la vida.
Lo hizo por partida doble, primero con un cabezazo de Lucía García a otro saque de esquina de Abelleira, y después con un penalti sobre Salma Paralluelo que transformó para su doblete sin inmutarse Alexia Putellas. Con el 0-4, España ponía la guinda al pastel.
Ante su público, Suiza no quiso bajar los brazos y obtuvo el premio del gol de la honra.
El conjunto local sacó partido a la contra del mayor y único error de España en defensa en todo el encuentro, y dejó con un pase en profundidad completamente sola a Pilgrim en la frontal del área.
Misa acudió rauda a tapar, pero se vio sin autoridad fuera de su área y no pudo quedarse el balón. Tras el rebote, la delantera suiza marcó sin oposición.
Esto provocó que España no se conformase con la ventaja que tenía, y que los cambios fuesen tan ofensivos como efectivos.
Athenea del Castillo, delantera del Real Madrid, apareció como un cohete desde el banquillo y anotó dos goles de bella factura, y Maite Oroz culminó la exhibición en el descuento cuando las suizas estaban ya completamente rendidas.
De este modo, y aprovechando el empate entre Italia y Suecia, a las pupilas de Montse Tomé apenas les queda lograr un punto en los próximos dos partidos para asegurarse matemáticamente el primer puesto en su grupo, la final a cuatro de la Liga de Naciones, y la opción de pelear una de las dos plazas disponibles para los Juegos Olímpicos de París en 2024, donde Francia ya espera como anfitriona.