Ha regresado el argentino Diego Vázquez al banquillo de Motagua, no ganó, pero con 10 hombres rescató un partido que pintaba mal en Juticalpa, ante un Olancho que desaprovechó la localía en la ida de la liguilla de repechaje.
«Destaco el esfuerzo y la agresividad del equipo, a pesar de jugar con un hombre menos por la expulsión de Fabricio Galindo en la primera etapa. Además, me gustó el orden y el esfuerzo, mejoramos mucho la agresividad en el segundo tiempo», apuntó.
Un hecho importante es rescatar un juego que lucía difícil: «Empatamos en una jugada a balón parado, aunque nos costó generar cuando estábamos 11 contra 11, para mi gusto debemos tener más posesión y llegadas», aclaró.
El sudamericano fue muy sincero y mencionó lo que no le gustó: «Lo que no me gustó fue la poca posesión. La cancha no está tan mala, pero sí un poco dura, la pelota pica muy alta, hay que mejorar el terreno de juego porque es un factor, pero nos faltó manejar más la pelota», finalizó.