Una intensa pero no muy extensa lluvia sorprendió (al margen de los pronósticos) a la ciudad capital, pero que también alivió a muchos, debido a que puede reducir la contaminación atmosférica.
La intensa, pero breve lluvia sorprendió a la capital, contradiciendo los pronósticos del tiempo. A pesar de la sorpresa, muchos se sintieron aliviados, ya que la lluvia puede disipar la capa de humo.
Durante varios minutos, una fuerte lluvia afectó diferentes sectores de la ciudad, dejando calles inundadas, cunetas obstruidas y viviendas dañadas por las correntadas de agua. Desde temprano en la tarde, residentes de la colonia Cerro Grande informaron sobre las fuertes lluvias, después de semanas de calor incesante y alta contaminación.
En varias avenidas de Comayagüela, igual el sistema de drenaje colapsó debido a la cantidad de agua, lo que provocó que las correntadas inundaran las calles y dejaran vehículos varados. Aunque muchos capitalinos agradecieron a Dios por la lluvia en las redes sociales, otros mostraron cómo las fuertes precipitaciones causaron inundaciones en avenidas céntricas.
Vecinos de Lomas del Toncontín y Roble Oeste reportaron la caída de granizo, compartiendo videos del fenómeno, típico al inicio de la temporada de lluvias. En el interior del Congreso Nacional, se reportaron afectaciones en varias áreas del edificio, y el personal tuvo que usar escobas y trapeadores para secar oficinas afectadas.
El alcalde del Distrito Central, Jorge Aldana, informó que hasta las 4:30 de la tarde se habían registrado 20 milímetros de lluvia, suficiente para causar emergencias en esta ciudad vulnerable. En los mercados de Comayagüela, las correntadas cubrieron el suelo y amenazaron los puestos comerciales, demostrando la fuerza del temporal.